La autoconfianza es una virtud cardinal para abrirte paso en el mundo laboral. Está comprobado que las personas que confían en sí mismas atraen más oportunidades y las aprovechan mejor cuando se les presentan. También son fácilmente tomadas en cuenta para empleos y ascensos.
Sin embargo, este atributo no es muy común en nuestro medio debido, seguramente, a que sigue primando una educación demasiado restrictiva, o demasiado permisiva. Sí es frecuente encontrar personas arrogantes, pero esto no tiene que ver con la autoconfianza. Todo lo contrario: quien confía en sí mismo no subestima a otros y no siente que deba estar mostrando sus ventajas a todo el mundo.
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La confianza en uno mismo se puede definir como una actitud en la que prima el amor propio, esto es, la valoración y aceptación de lo que uno es. Al mismo tiempo, alude a la percepción de que uno es competente para vivir, para actuar y para proponerse metas y lograrlas. También, por supuesto, incluye un reconocimiento realista de las propias limitaciones, sin que esto induzca al menosprecio.
En tanto se trata de una actitud, es posible cultivarla y desarrollarla. No de la noche a la mañana, pero sí a través de un proceso que puede ser lento, pero que si es constante, seguramente llevará a que te quieras más y a que tu vida sea más exitosa. Estos son algunos tips para incrementar tu autoconfianza.
Conocerte y comprenderte
Es imposible otorgarle valor real a algo o alguien que no conoces. De seguro, todo el mundo cree que se conoce a sí mismo. Sin embargo, si profundizas un poco es posible que te des cuenta de que ese conocimiento es superficial y que, por eso mismo, no te aprecias lo suficiente.
Es frecuente que muchas personas decidan verse a través de los demás. Esto quiere decir que valoran en sí mismos solamente lo que los demás valoran en ellos. Como quien dice: ven la imagen a través de un espejo social, pero no se observan a sí mismos desde sus propios criterios.
Por lo general, el criterio de otros es de juzgamiento. A este, debe contraponerse una lectura de sí mismo basada en la comprensión. Esto implica que sabes por qué eres como eres y aceptas esto; que entiendes que tu historia es única y, por eso, no tienes que parecerte a alguien más.
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Autodisciplinarte y perseverar
Confiar en uno mismo es sobre todo confiar en lo que uno es capaz de hacer. Pero esa capacidad de hacer no viene dada tanto por el hecho de que tengas un don, o una cualidad especial, sino, muy especialmente, una gran capacidad para enfocarte en una meta y perseverar en ella hasta lograrla.
Si te conoces, sabes qué eres capaz de lograr. Pero con saberlo no basta. Es necesario que desarrolles la disciplina, la capacidad de sacrificio, la paciencia y la constancia. Nadie nace con esas cualidades, sino que se van consiguiendo a medida que maduramos.
Concentrarte en tus habilidades y no en los obstáculos
Culpar a los demás, a las circunstancias o a la mala suerte es una táctica que emplean frecuentemente quienes no confían en sí mismos. A veces se convierte en un hábito y, por eso, en lugar de detenerte a reflexionar sobre lo que debes y puedes hacer, más bien te enfocas en los obstáculos externos que encuentras en tu camino. >>Me interesa la Especialización en Gerencia del Talento Humano
Esto se convierte en un pretexto para no avanzar. Y si no avanzas, disminuye la confianza en ti mismo. Para no caer en esa trampa, debes concentrarte en ti, en lo que eres capaz de hacer, pese a los obstáculos. Si no hay barreras, cualquiera puede seguir adelante. Justamente de lo que se trata es de encontrar la manera de superar los obstáculos, para que aumente la confianza en ti mismo.
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