Cinco consejos para aprobar los exámenes orales

Para muchas personas el examen oral es sinónimo de estrés, miedo, angustia y demás; y no es para menos ya que tendrás al profesor frente a ti esperando tus respuestas… ¡ojo!, como lo leíste: “respuestas”, pues no se trata de que el profesor se encuentre esperando un error tuyo para apuntarte en su lista negra.

Es común que los profesores nos pongan un tanto nerviosos a la hora de un examen y más si es de manera oral, pero lamentablemente esto puede provocar que te bloquees y olvides muchas respuestas.

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Tener un examen oral realmente sencillo, sólo debes evitar estresarte demasiado y sentir seguridad en tus conocimientos; por lo mismo dejamos algunos consejos que pueden ser de gran utilidad para estos momentos:

Practica. Una buena recomendación podría ser practicar con otras personas sobre los temas de tu examen, así repasaras los temas y te servirá para estudiar. Además podrás sentir menos estrés de que te observen. Así que lo recomendable es que lo hagas frente a un público que pueda hacerte una serie de preguntas, así podrás controlar tus nervios.

No memorices. Olvida aprender de memoria el libro o notas que te dio el profesor durante las clases, pues de esta manera sólo conseguirás repetir sin sentido y realmente no aprenderás nada y al momento del examen con el estrés olvidarás todo frente al profesor.

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Demuestra seguridad. Antes que nada debes tener confianza en ti mismo y en tus conocimientos, recuerda que ya tuviste oportunidad de estudiar y repasar y estás más que preparado para ese examen. ¡No permitas que te ganen los nervios!, así que al estar frente a tu profesor debes olvidar el estrés y nerviosismo, imponer tus conocimientos y demostrar todo lo que sabes.

No te precipites al responder. Toma tu tiempo para responder cada respuesta que te realicen, responde con lógica y no divagues. Responde con lo fundamental y comienza por lo más importante, recuerda que “no por hablar mucho dirás cosas más importantes”.

Evita los silencios. Es muy importante que evites lo más posible hacer silencios, está bien que debes tomar tu tiempo al responder, pero eso no significa que te quedes por un largo rato sin decir absolutamente nada. Esto puede restarte puntos, pero ¡ojo! no hables por hablar, así que podrías dejar ese punto hasta el final o preguntar al profesor algo al respecto para poder detallar el tema.