En la actualidad existen miles de teorías que se dicen sobre la educación universitaria en México, y a continuación desmitificaremos algunas de ellas.
Mito: Existen cursos de preparación para los exámenes de ingreso a las universidades públicas con promesas como: Nosotros tenemos el examen; te conseguimos el lugar y papeles para ingresar; etc.
Realidad: La Universidad Nacional Autónoma de México, el Instituto Politécnico Nacional y la Universidad Autónoma Metropolitana realizan exámenes en concurso de ingreso democrático y en igualdad de condiciones para todos los postulantes, es decir, los lugares solo se obtienen en función de cada uno de los aciertos que obtenga cada aspirante.
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Mito: “El estado no quiere que estudiemos y por eso no hay cupo”
Realidad: En la actualidad el número de postulantes ha incrementado significativamente, mientras que las casas de estudio resultan ya insuficientes respecto al cupo. Por esta razón es que la exigencia en cuanto a puntaje es más alta, y cada año incrementa.
Mito: Si no estudio en una universidad reconocida, nunca encontraré trabajo.
Realidad: Si bien es cierto que estudiar en una universidad de renombre te da un plus para tu currículum, esto no asegura ni el éxito ni el fracaso de un estudiante o egresado. Lo que se recomienda es que los estudiantes acudan a los centros de enseñanza que se adecuen a su perfil y a sus posibilidades.
Mito: Las guías de estudio que dan las universidades públicas no sirven de nada.
Realidad: Las universidades públicas brindan una guía para preparar tu examen de selección. Si bien es cierto que no encuentras las preguntas exactas, los ejercicios que intervienen en ellas son similares, lo cual te permitirá tener un conocimiento más completo para resolver tu examen.
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Mito: Cada carrera pide un mínimo de aciertos para ingresar.
Realidad: Las universidades públicas no piden número de aciertos mínimos para ingresar, lo rige la demanda de ingreso y el cupo en cada entidad académica, es decir, a mayor número de aciertos mayor posibilidad de obtener un lugar en la carrera de tu preferencia.
Mito: Uno de los reclamos que se hace específicamente a la UNAM es que la mayoría de las plazas están designadas o reservadas para los alumnos provenientes de bachilleratos de la UNAM como las Escuelas Nacionales Preparatorias o los Colegios de Ciencias y Humanidades.
Realidad: Año con año, el consejo técnico de cada facultad establece el número de estudiantes de primer ingreso que cada año podrá ser inscrito en cada plantel y carrera. Una vez que se establece el cupo para cada carrera, los aspirantes se seleccionan según el siguiente orden: alumnos egresados de la ENP o CCH que hayan concluido sus estudios en un máximo de 4 años y tengan promedio mínimo de 7. Luego aquellos aspirantes con promedio mínimo de 7 en el bachillerato que hayan sido seleccionados en el concurso correspondiente, es decir, que hayan alcanzado los puntajes exigidos por cada carrera/plantel en el examen o concurso de ingreso.
Ahora ya sabes lo que se requiere para ingresa a la universidad a partir de la desmitificación de teorías que circundan cada año. Si buscas ingresar a la universidad estudia y busca el mejor puntaje. Esto te asegurará estudiar en la universidad y carrera de tu preferencia.
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