Seguro que has escuchado que cada persona es diferente, y efectivamente así es, para un plan alimentario, un tratamiento médico y hasta para aprender se requiere de diferentes elementos.
Los procesos de aprendizaje no siempre tienen que ver tan solo con leer libros, de hecho se puede adquirir conocimientos tomando en cuenta la forma de recepción y asimilación de cada persona. Hoy te presentamos algunos que tipos de aprendizaje para que tomes en cuenta y elijas el que puede ayudarte:
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El aprendizaje implícito es el que no es intencional y se ejecuta de manera automática, “el cerebro cuenta ya con cierta información, por lo que realiza un sinnúmero de acciones de manera autónoma, y aunque no estemos tan consientes de ellas, nuestro cerebro se encuentra siempre alerta y receptivo a aprender”, dijo en entrevista el neurólogo Alejandro Ortega.
El aprendizaje explícito se realiza conscientemente, por lo que se aprende información relevante, de hecho es uno de los aprendizajes donde nuestro cerebro se ejercita mucho.
“Este aprendizaje es muy recomendable durante toda la vida, principalmente en personas mayores con la finalidad de evitar deficiencia neural y atrofia cerebral”, indicó Ortega.
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El emocional aporta grandes beneficios a estudiantes ya que genera bienestar y mejora la relación con los demás; mientras que el observacional, es una forma de aprendizaje ideal para las personas más visuales ya que se basa en aprender de manera empírica.
El aprendizaje significativo es de los más enriquecedores, pues recolecta, selecciona y organiza información con relación a conceptos ya conocidos; por otro lado, el cooperativo es de los más comunes, ya que se hace de manera grupal y permite aprender apoyándose de conocimientos previos individuales y crear uno nuevo de acuerdo a un grupo; mientras tanto el colaborativo (aunque parecido al anterior), sólo que este se hace de acuerdo a un tema relacionado por un docente, y el anterior es elegido por el grupo.
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También están el aprendizaje asociativo y no asociativo, en el primero se aprende entre dos estímulos o ideas asociando conceptos; y el segundo se relaciona a nuestra sensibilidad y costumbres adquiridas.
El experiencial se basa como su nombre lo dice en la experiencia mediante ensayo y error, guiándose por la percepción sobre lo sucedido y la reflexión; o el memorístico (el cual no es tan recomendable ya que se aprende a corto plazo), el cual se basa aprender ciertos temas mediante la repetición.
O bien, está el que es por descubrimiento, uno de los más activos ya que se realiza participando constantemente, interactúan, buscan información, reaccionan y organizan lo aprendido; y el receptivo que es todo lo contrario al anterior, ya que sólo se comprende.