El currículum vitae es el elemento más importante en el proceso de reclutamiento, ya que es el primer contacto que se tiene con el área de recursos humanos, no por algo es de suma importancia que te tomes tu tiempo para elaborar un excelente CV con el objetivo de ampliar tus oportunidades.
Los reclutadores tardan una media de 6 segundos en decidir si quieren investigar a un candidato a profundidad o no
Esto no quiere decir que mientas o que te dediques a escribir la biografía de tu vida, ya que este se trata de resaltar tu profesionalismo.
Considera que el CV debe ser visual, original, llamativo, honesto; y creativo, además de resaltar tu experiencia, formación y perfil profesional, añadiendo valor y diferenciarse del resto de los postulantes. Si no quieres que pase desapercibido, borra estas cosas ya:
Para empezar hay que dejar a un lado las opiniones y apartados donde hables de lo organizado y apasionado que eres, déjalo para el momento de la entrevista, ya que si realmente lo eres el reclutador lo descubrirá en ese justo momento.
Así como tampoco explicaciones de por qué quieres ese trabajo, déjalo para una carta de presentación o directamente para la entrevista; o bien las razones por las que dejaste otra empresa, ya que esa información es irrelevante (si pasas el primer filtro, prepara respuesta a esa pregunta, seguro te la harán), al igual que tus notas, salvo que hayas salido de la universidad mención honorifica.
El espacio en blanco hace que sea más fácil de leer, así que mientras más espacio vacío haya en una página, más fácil le resultará a alguien leer lo que realmente hay en él, opta por un diseño limpio y minimalista, ya que la sobrecarga visual hará que el reclutador omita leer tu CV.
Evita por completo usar una fuente inferior a 11 puntos, y tipografía infantil como “Comic Sans”, las tipografías estándar son las más recomendables como “Arial” o “Sans Serif”.
Los hobbies tampoco son datos importantes para el CV y agregarlos no te da ninguna ventaja, sino lo opuesto ya que el seleccionador lo considerará como una pérdida de tiempo, así que elimínalos en la medida de lo posible.
No conviene agregar el sueldo que pretendes, ya que este se debe negociar a la hora de la entrevista.
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En cuanto a la jerga empresarial, palabras rebuscadas, encabezados, pies de página, imágenes, tablas o enlaces (links) de redes sociales, debes evitarlos por completo (solo que la vacante los requiera).
Los años de experiencia podrían parecer importantes en este documento, pero si agregas toda tu experiencia será demasiada información recopilada y el reclutador evitará leerlo. Para no dejarlos a un lado puedes denotarlo y sólo incluir los trabajos de los últimos años.
Las referencias no son tan importantes, al menos que te lo soliciten; empleos temporales que no son de gran relevancia, o incluso información personal (número de Seguro Social, religión, estado civil); de hecho esta última se solía incluir en antiguos CV, pero hoy en día puede ser ilegal preguntar algunas de estas cosas.
No olvides proporcionar un email profesional, de lo contrario puede dar una imagen totalmente errónea sobre ti.
Finalmente no olvides brindar información totalmente cierta sino tendrás que asumir las consecuencias.
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