¿Tienes vocación o quieres convertirte en docente? Recuerda que un buen profesor es la base de la educación exitosa y para que esto sea así es importante tener una serie de habilidades tanto personales como profesionales. Toma nota de las habilidades para ser docente.
Más allá de enseñar
“Enseñar no sólo significa transferir conocimientos, es mucho más. Se trata de saber crear las condiciones necesarias para que los alumnos aprendan a razonar, a pensar y a construir su propio conocimiento sobre el mundo que nos rodea. De hecho, siempre he dicho que esta es una de las profesiones más nobles a la que se puede aspirar, ya que implica la formación de las futuras generaciones”, comentó en entrevista el profesor Álvaro Hernández.
Si estás decidido a convertirte en todo un docente, entonces tienes que tomar en consideración varios puntos. Si pretendes laborar en el sector público o privado, el grado escolar que quieres impartir, y si quieres laborar en el sector público o privado.
Sector público
Por ejemplo, para ser maestro de alguna escuela pública del país se debe buscar una plaza, estas son ofertadas por parte del Gobierno de la República y administraciones estatales mediante la Secretaría de Educación Pública (SEP), así que deberás participar en un proceso de admisión a la plantilla magisterial (para plazas en educación básica, media y superior); lo que si podemos resaltar es que es un proceso largo y difícil de conseguir.
Sector privado
Mientras tanto, en el caso de la docencia privada, el proceso en ocasiones requiere de la participación en una convocatoria más sencilla con términos establecidos por cada institución educativa. También las escuelas privadas suelen solicitar docentes por medios habituales de reclutamiento y ofertas de vacantes en buscadores de empleo, por lo que el proceso es mucho más sencillo.
Entre las habilidades que nunca pueden fallar en un docente que nos mencionó el profesor Hernández se encuentran:
Tener vocación
“No todo el mundo sirve para esta profesión, en contra de lo que tan a menudo se cree. Hace falta tener el perfil personal adecuado. Un educador nace con ese talento, lo cultiva, lo enriquece a lo largo de su vida con sus estudios, formación, prácticas y experiencias adquiridas. Así que, sin vocación un docente no es capaz de motivar a un grupo, no responde de manera afectiva y asertiva a las necesidades e inquietudes naturales del desarrollo físico y emocional de los alumnos y no puede ser un facilitador de los procesos de aprendizaje”, puntualizó Hernández.
Responsabilidad
Esta es una de las habilidades clave para ser profesor, ya que es fundamental esforzarse por tener las mismas expectativas y estándares que exigen los alumnos, así que es vital ser justo, igualitario y un ejemplo a seguir.
Buen comunicador
Un docente debe ser un buen comunicador, pues no sólo se trata de contar con los conocimientos suficientes para impartir una clase, también cómo se logra trasmitirlos y que estos causen interés, ya que como profesor es necesario captar y mantener la atención de un grupo.
Saber escuchar
De acuerdo al profesor Álvaro, es de suma importancia “saber escuchar a los alumnos desde el corazón, ya que no es lo mismo oír (de manera pasiva), que escuchar (con interés), por lo que ser docente implica un esfuerzo especial por escuchar y acompañar a tus alumnos, y, sobre todo, hacerles ver que lo que te están diciendo te importa de verdad. En muchas ocasiones como profesor eres confidente tanto de problemas académicos como personales y los estudiantes deben saber que podemos ser un apoyo para ellos”.
Estímulo
Muchas veces se cree que el docente está en un aula para dar respuesta y para ofrecer únicamente soluciones, lo cual no siempre es así. “Siempre he defendido la idea de que un profesor debe ser capaz de generar las mejores preguntas para obtener mejores respuestas. Es por ello que un profesor debe inspirar y tener la capacidad de hacer que sus propios alumnos aprendan por sí mismos, de esta manera los estimulamos a sacar todo su potencial”, indicó el profesor Hernández durante la entrevista.