No hay duda de que la lectura es un hábito que todo el mundo debería adquirir ya que trae múltiples beneficios.
Si eres estudiante, es un hábito que si no lo tienes debes aprender a hacerlo parte de tus días, ya que, en muchas asignaturas sobre todo las que tienen que ver con la carrera o especialidad es necesario leer e investigar sobre muchos temas a la vez, y debes estar preparado para comprenderlos.
Lamentablemente, hay fallas al leer, sobre todo cuando se trata de lectura rápida, ya que es muy común la falta de comprensión. “Al aumentar la velocidad amplías tu visión periférica y reduces las fijaciones por línea y pones a trabajar tu mente más de lo que acostumbras”. Así lo indica El Estudio de la comprensión lectora en Latinoamérica: necesidad de un enfoque (CLL), del Centro de Investigación Avanzada en Educación, de la Universidad de Chile.
Así que, sencillamente, tu cerebro no sabe cómo procesar toda la información lo que hace que se te dificulte aprender y comprender lo leído.
¿Por qué es necesaria la compresión?
Según el CLL la comprensión es una de las claves fundamentales, ya que de esta manera puedes adquirir conocimientos de forma rápida y efectiva sin tener que repetir.
Así que, “no importa lo rápido que puedas leer, o la cantidad de lecturas, o lo concentrado que estés si no eres capaz de comprender y retener información, por lo que, todo el esfuerzo invertido es inútil si debes leer el mismo material dos o tres veces”.
Algunos puntos que puedes tomar en consideración para evitar lo anterior y adquirir comprensión lectora son:
Gusto por la lectura
Indudablemente se trata de uno de los puntos medulares, ya que es necesario tener la motivación necesaria y el gusto por la lectura, o buscar alicientes al leer, ya que de esta manera podrás aprender a leer mejor.
Aprende vocabulario
¿Sabías que muchos de los problemas a la hora de leer se deben a que no se entienden las palabras?
Tal vez puede sonar extraño ¿cómo no podríamos conocer las palabras en nuestro mismo idioma?, pero es realmente más común de lo que te puedes imaginar.
En este caso puedes realizar diferentes tácticas, ya sea que, realices una lectura rápida y hagas una lista aparte para después buscar cada palabra que no comprendiste bien, y después volver a leer; o bien, puedes leer por secciones, armar una lista y antes de pasar a la siguiente sección buscar la lista de palabras. En ambos casos es necesario que releas en su contexto para comprender exactamente lo que dice la lectura.
Lo mejor de todo, es que con esto enriquecerás tu vocabulario, comprenderás mejor lo leído y con futuros textos sobre el mismo tema no tendrás que realizar la misma acción.
Busca información sobre la lectura
Otro gran método que puedes considerar es buscar información muy breve o resúmenes sobre lo que leerás, lo cual no significa que dejes a un lado un libro completo o textos indicados en cada una de tus asignaturas; sino que, esto te ayudara a tener datos previos y podrás reflexionar sobre la estructura del género en concreto, una gran estrategia para mejorar la comprensión lectora. O bien, puedes echar un vistazo a los capítulos, ilustraciones del texto (en caso de que existan), algunos párrafos tomados al azar y responder algunas preguntas como: ¿de qué podría hablar el texto?, ¿qué se sobre este tema?, ¿quién es el autor y qué se de él?, entre otras.
Haz scanning
Otro método de lectura para conocer datos en concreto como cifras, fechas o frases clave, así es posible conocer el contenido o saber de qué trata, además de que se puede encontrar un dato en particular con mayor rapidez, ya que se hace de manera focalizada.
Identifica tu información relevante
Es importante tener claro que, pese a que varias personas lean un mismo libro o texto ninguno comparte un mismo objetivo al leer, por lo que, es de gran importancia darse a la tarea de identificar cuál es tu objetivo y la información relevante.
Después de definirlo con precisión te recomendamos leer y si quieres profundizar más en el área; para ello, podrías mientras lees puedes hacerte una serie de preguntas y responderlas conforme va el texto.
Lee despacio y con calma
Si estás buscando mejorar tu comprensión lectora debes leer cada línea despacio y sin prisa, así te sentirás obligado a entender cada oración y párrafo en este. No te olvides de hacer las pausas necesarias en cada párrafo y analizar lo leído para asegurarte de que entendiste bien todo.
Y, un punto que no puede faltar es que, al momento de leer te recomendamos que lo hagas en un lugar tranquilo para que puedas concentrar toda tu atención; y si este es silencioso y bien iluminado, entonces no habrá duda de que será de gran ayuda para tu comprensión lectora.
Elabora mapas, esquemas y dibujos
Ausubel y Novak, creadores de la teoría del aprendizaje significativo y de los mapas conceptuales, respectivamente, creían que organizar las ideas por medio de círculos, recuadros y etiquetas contribuye al aprendizaje significativo. Así, que ¡no dudes hacer uso de estas herramientas!
Asegúrate de que comprendiste el texto
Después de terminar el texto, hay diversas pruebas que puedes hacer para saber si en verdad comprendiste bien lo leído, ya sea que realices algún resumen o cuestionario, hay una clave infalible para saber que comprendiste el texto.
Lo recomendable es explicar a una persona con tus propias palabras lo que leíste de manera breve y sin palabras técnicas. Y si es posible que lo expliques a un niño mucho mejor (siempre y cuando el tema lo permita).