Es muy común que la gente piense que el primer año de universidad se empieza con un montón de ilusión y grandes expectativas, y para algunos es así. Pero para otros esta visión no es tan realista ya que se dan cuenta de que esa carrera no era exactamente lo que tenían en mente y les aguarda una tortura que al menos durará cuatro años.
Ya sea porque no tuviste la fortuna de ser seleccionado para la carrera de tus sueños, por cuestiones de movilidad, por tradición o imposición familiar, por seguir los gustos de tus amigos, por falta de información, o cualquier otra razón, es posible terminar en el lugar que no queramos. Afortunadamente no tenemos que vivir frustrados y podemos hallar una respuesta.
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Si es tu caso, seguramente estás preguntándote, ¿y ahora qué hago? si no sé ni siquiera lo que me gusta o en que soy bueno; ¿pero, cómo voy a cambiar ahora y “tirar” todos estos años, formación y experiencia?; ¿y qué van a pensar…mis padres/pareja/…?, ¿y si me sale mal y luego no puedo hacer otra cosa?, ¿y de qué voy a vivir si lo dejo todo ahora?
Pueden existir muchas más preguntas que ronden tu cabeza, pero en realidad la respuesta no es tan complicada.
En caso de que no te sientas tan conforme con tu carrera y de no estar seguro de que no es lo que buscabas puedes encontrar algunos puntos que te harán aceptar que no es lo que querías, por ejemplo, prefieres otras asignaturas, tienes malos resultados, hay lentitud en captar conceptos, no te proyectas en tu carrera, no te interesa ejercer la profesión, tienes falta de motivación y entusiasmo, entre otros. Así que, si sientes que algo no está correcto, te recomendamos que te detengas un momento a reflexionar.
Si ya estás mas que convencido que esa carrera no es lo tuyo, no te preocupes ni te compliques tanto la vida, pues lo mejor de todo es que puedes hacer un cambio radical en tu vida sin tanta complicación, así que lo mejor es que elijas algo en lo que realmente eres bueno, te gusta y te apasiona. Parece simple, pero es cierto, muchas veces elegimos enredarnos más de lo necesario.
Probablemente tengas pasión por varias cosas, así que podrías hacer una lista con los pros y contras de estas pasiones, incluyendo el campo de acción de cada uno, así será más sencilla la selección.
Algo que no puedes dejar es tirar la toalla por completo, al menos finaliza el grado, programa o curso en el que te encuentras mientras checas qué tanto puedes hacer para cambiar a lo que te gusta, ya que en una de esas puede que corras con la suerte de sólo cambiar de plan educativo en la misma universidad donde te encuentras y pues hasta revalidar algunas materias (obviamente eso depende mucho del tiempo de carrera a la que te vas a cambiar).
Es de suma importancia que investigues a la perfección todo acerca de la otra carrera que pretendes cambiarte, pues tampoco puedes estar cambiando de una a otra todo el tiempo, ya que de ser así nunca terminarás de estudiar.
Así que lee sobre esa otra carrera, checa el campo de acción de esta, y revisa referencias y experiencias de conocidos o personas cercanas que tengan contacto con esta.
No olvides preparar el papeleo, acude al colegio al que deseas matricularte nuevamente para el curso que viene, platica sobre tu situación y asesórate bien qué pasos debes seguir y con qué debes cumplir.Una vez que tengas claros todos los requisitos, checa cuáles cumples y cuáles no y qué puedes hacer para conseguirlos. Lo mejor es llevar en un papel una lista con todas las preguntas que deseas hacer y anotar cada respuesta clara que tengas.
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Lo mejor es contar con el apoyo de tu familia, pero si al final no es de esta manera no te sientas presionado a no tomar la decisión de hacer el cambio (si es posible). Recuerda que tu carrera ocupará un papel de suma importancia en tu futuro profesional y marcará prácticamente toda tu vida, así que, si no te gusta tienes campo libre de hacer el cambio que tanto necesitas. Probablemente puede ser complicado hacerlo en un principio, pero con el tiempo es lo mejor que puedes hacer por ti mismo.
Toma en consideración todo el mundo puede tener una equivocación, incluso muchos profesionistas reconocidos y de renombre tuvieron que pasar por cambios radicales en su profesión ya que iniciaron con estudios totalmente distintos a los que los hizo famosos.
Lo mejor es entender que una experiencia se construirá sobre la otra, y no porque pienses que tomaste la decisión equivocada ahora, significa que fue un error. Recordando al finado y afamado Steve Jobs, popularmente decía, «No puedes conectar los puntos mirando hacia adelante; solo puedes hacerlo mirando hacia atrás».