¿Te has preguntado alguna vez por qué algunos niños en edad escolar son capaces de leer mucho más rápido que muchos de sus compañeros de clase? Un estudio llevado a cabo recientemente en el King’s College de Londres podría haber dado con la respuesta.
>> Curso de Animación a la Lectura para Maestros y Profesores
Y es que, varios investigadores de esta institución de enseñanza británica han descubierto que la técnica de puntuación genética puede ser una herramienta esencial para predecir el rendimiento en la lectura durante los años escolares.
A través de este estudio, que ha sido recogido en la revista Scientific Studies of Reading, se ha puesto de manifiesto que una puntuación genética que comprende alrededor de 20.000 variantes de ADN, explicaría hasta el 5% de las diferencias entre el rendimiento de lectura de los niños.
Según han revelado los autores de este estudio, los estudiantes que tenían las puntuaciones genéticas más altas y más bajas difirieron hasta en un total de dos años en su rendimiento de lectura.
Esto significaría que, gracias a este importante hallazgo, el uso de puntuaciones genéticas podría convertirse en una eficaz herramienta para predecir las fortalezas y debilidades en las habilidades de aprendizaje de los niños. Por ejemplo, podrían ser útiles para identificar y abordar las dificultades tempranas de lectura que sufren algunos escolares, antes de que comiencen a tener problemas en la escuela.
Saskia Selzam, autor principal de esta investigación, asegura que «este estudio ofrece un punto de partida importante para explorar las diferencias genéticas en la capacidad de lectura, utilizando el marcado poligénico».
El cálculo de la puntuación poligénica de una persona requiere información de un estudio de asociación genómica, y a través de éste, se podrían encontrar variantes genéticas específicas vinculadas a rasgos particulares, en este caso, relacionadas con el logro educativo.
De esta forma, y según destacan los autores de este estudio, las personas con muchos SNPs relacionados con el rendimiento académico tendrán una mayor puntuación poligénica y, en consecuencia, un mayor rendimiento académico, mientras que las personas con menos SNPs tendrán una puntuación más baja y, por lo tanto, niveles más bajos de logro académico.