El Gobierno español aprobó en el año 2012 un real decreto-ley para racionalizar el gasto público en el ámbito educativo que permitía a las universidades incrementar las tasas universitarias prácticamente a su antojo. Esto se tradujo en un aumento de hasta el 65% en el caso de Madrid, la comunidad donde más se ha notado este incremento.
Pese al enorme descontento popular que despertó esta medida, un estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA) alumbra su lado positivo: desde su implantación, los alumnos se esfuerzan más y, por tanto, obtienen mayor recompensa académica. Según ese mismo informe, de media, se ha reducido el número medio de veces que un estudiante se matricula antes de aprobar, han aumentado la probabilidad de aprobar en primera matrícula y ha mejorado las calificaciones medias.
Sin embargo, el estudio también recalca que estos efectos varían en función de la carrera y la capacidad del estudiante, siendo mayor para los que cuentan con peores notas en la prueba de acceso a la universidad. En las carrera de Economía y ADE los estudiantes más rezagados han aumentado la probabilidad de aprobar en primera matrícula en un 10% y reducido a la mitad el tiempo extra requerido en promedio para aprobar una asignatura. Con respecto a los alumnos más brillantes, han mejorado sus calificaciones medias (0,8 puntos sobre 10 en Economía y ADE y en 0,6 puntos Medicina).
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Los autores de este estudio utilizaron datos de una muestra de la Universidad de Valencia en los grados de Economía, ADE y Medicina desde 2010 hasta 2014. En el informe reflejan tres aspectos: el número de veces que el estudiante se matricula para superar el módulo, la probabilidad de aprobar la asignatura a la primera y las calificaciones medias.
Desde Fedea sugieren que “el diseño basado en mantener las tasas de entrada y aumentar la penalización en el coste de la matrícula de los repetidores provoca el mayor efecto positivo sobre el rendimiento académico, a costa de un mayor esfuerzo de los estudiantes”.
Explicaciones que no convencen a la mayoría de asociaciones y sindicatos de alumnos y profesores, que siguen manifestándose por toda España para reclamar una disminución del precio de las tasas universitarias. Sin ir más lejos, el movimiento estudiantil de Cataluña ha convocado una movilización este jueves 17 para reclamar al gobierno catalán una rebaja del 30% del precio de las matrículas universitarias.
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