«Me comprometo a que no se hagan públicos los resultados de las evaluaciones, si ése es el problema». Son palabras del ministro de Educación en funciones, Íñigo Méndez de Vigo, después de que este martes se aprobara en el Congreso de los Diputados la proposición de ley para suspender la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa, LOMCE. Aunque se haya dado este paso, se trata de un gesto simbólico ya que en la actual situación de falta de Gobierno efectivo no es posible llevarla a cabo.
En un mes los estudiantes de 6º de Primaria de toda España tendrán que enfrentarse a una de las reválidas que recoge la LOMCE. Entre las muchas críticas recibidas, se mencionaba que se establecerán rankings de mejores y peores colegios, algo que perjudica en lugar de servir para mejorar la educación. El todavía ministro, en una entrevista concedida en La Noche en 24 horas de Televisión Española, explicó que la información obtenida con las pruebas será interna. «De lo que se trata es de evaluar y de saber si los chicos han aprendido y ver que las cosas están bien. No hay ningún otro interés», aseguró.
El Congreso da el primer paso para paralizar la LOMCE
Unas horas antes, el Congreso aprobaba el primer paso para suspender la Ley. «Queremos derogar la LOMCE para sustituirla por una nueva ley con un gran pacto educativo aunque sea difícil», explicó Rafael Simancas, diputado del grupo parlamentario socialista del que partió la proposición de ley. Dijo saber que ninguna ley se cambia sin consenso y que el objetivo no es volver a la LOGSE o a la LOE, aprobadas por sus gobiernos: «pero tampoco la LOMCE de reválidas y rezos».
Después de su intervención comparecieron los representantes del resto de grupos para manifestarse a favor o en contra de seguir con los trámites de la proposición. La diputada de Izquierda Unida-Unidad Popular, Sol Sánchez, recordó que aunque estaban a favor de apoyar la paralización no es suficiente porque ya existe un pacto firmado por toda la oposición en 2013, a excepción del PP, Unión del Pueblo Navarro, Foro Asturias y UPyD, con el objetivo de derogarla cuando tuvieran los votos necesarios.
Por su parte, la portavoz del PP, Sandra Moneo acusó a los socialistas de someter a la educación a la confrontación. «No pueden dar lecciones ni de respeto democrático ni de búsqueda de soluciones», afirmó, para recordar que el único objetivo del PSOE es derogar la ley a la más mínima oportunidad. Para la diputada es una irresponsabilidad que se plantee un cambio sin alternativa y ha avisado, en declaraciones recogidas por Europa Press, que si se deroga la LOMCE habrá un vacío que impedirá el funcionamiento de la escuela.
Al final de la sesión y después de escuchar todas las intervenciones se procedió a la votación que salió a favor de la proposición con 186 votos de PSOE, Podemos, Compromís, Esquerra Republicana, Democracia y Libertad, PNV, IU-Unidad Popular, y EH Bildu. Hubo 112 en contra del PP y Foro Asturias, y 41 abstenciones de Ciudadanos, Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro.
Entre las medidas más criticadas que introduce la LOMCE, además de las reválidas al final de Primaria, están el resto que se harán al acabar la ESO y el Bachillerato aunque para estas todavía no hay una normativa que regule las condiciones. Tampoco se sabe cuál será el procedimiento que sustituya a la actual Selectividad o Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) y que tenía que finalizar este año.
En la LOMCE se especifica que para el curso que viene las propias universidades son las que tienen que diseñarlo o bien teniendo en cuenta los resultados de la reválida de Bachillerato o realizando las pruebas que consideren oportunas. Hace unos días se ha llegado a un acuerdo entre el Ministerio y la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) para crear una comisión mixta que pueda perfilar la solución de cara al curso 2017/2018.
Habrá huelga de estudiantes los días 13 y 14 de abril
Desde el sindicato de profesores ANPE se ha exigido que cualquier medida que se adopte sobre la paralización y derogación de la Ley venga precedida de un pacto de Estado que dé seguridad y estabilidad al sistema educativo. «Advertimos que para derogar una ley hay que tener preparada una norma que la sustituya. Y tampoco es la solución la vuelta automática a la LOE», han explicado en un comunicado.
«Parecen olvidar los proponentes que el calendario de la LOMCE va inserto en la propia Ley y no puede derogarse aisladamente, sino que requiere la derogación de un precepto de una ley orgánica y elaborar una nueva resulta materialmente imposible aprobarla en un plazo de seis meses», recuerdan.
Por su parte, el Sindicato de Estudiantes ha afirmado que la paralización no es suficiente. Y ha convocado al resto de alumnos a que secunden la huelga que han convocado para los próximos días 13 y 14 de abril: «Si alguien pensaba que la Marea Verde había desaparecido, decimos que para nada».
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