La presión del mercado de trabajo, el miedo a no retomar los estudios o la sensación de alargar demasiado la etapa de formación son los principales obstáculos a la hora de plantearse un año sabático.
Sin embargo, en algunos países la realidad es bien distinta y es habitual tomarse un año sabático o Gap Year antes de comenzar los estudios universitarios o la siguiente etapa académica. Y es que, según confirman los expertos, hacer un punto de inflexión en este momento de la vida puede tener muchos beneficios sobre el estudiante.
Antes de nada, hay que tener en cuenta que disfrutar de un año sabático no es pasar 365 días sin hacer nada, sino que este tiempo debería de servir al estudiante para hacerse una composición de lugar sobre sus expectativas profesionales y para prepararse también mejor el comienzo de la etapa universitaria.
Por lo tanto, y si se sabe enfocar bien, tomarse un año sabático antes de empezar la universidad puede traer muchos beneficios a quienes lo disfrutan. Te contamos cuáles son.
Vivir experiencias vitales
Viajar, conocer otros países y sumergirse en una nueva cultura es una de las experiencias vitales más enriquecedoras, y además permite abrir la mente.
Ser más independiente
Hay personas que buscan el año sabático para salir de la comodidad de su hogar y enfrentarse al hecho de ser independiente.
Aprender y practicar idiomas
Pasar una temporada en otro país es clave para entrar en contacto con personas locales y así aprender idiomas o practicarlos y aumentar de nivel, lo que sin duda será un valor diferencial en el currículum.
Descubrirse a uno mismo
No hay nada como salir de tu zona de confort para descubrir cómo reaccionas y descubrir aspectos de ti mismo desconocidos hasta ese momento.
Habilidades sociales y comunicativas
Tomarse un año sabático es ideal para mejorar habilidades sociales y comunicativas, habilidades blandas claves en casi cualquier trabajo. Y si te lo planteas, también puedes hacer un curso formativo en aquellos aspectos que creas que pueden ser de tu interés.
Aprender idiomas
Íntimamente ligado a los viajes se encuentra la posibilidad de aprender idiomas. Si el joven quiere avanzar en su nivel de inglés o aprender otros idiomas que se demanden en el mercado laboral, esta experiencia le permitirá mejorar su empleabilidad.