En torno a 41 millones de niños menores de cinco años son obesos o tienen sobrepeso en todo el mundo y la mayoría proceden de países de bajos y medios ingresos. La Comisión para acabar con la Obesidad Infantil (ECHO por sus siglas en inglés, Commission on Ending Childhood Obesity) ha terminado un proceso de dos años con un informe en el que se incluyen una serie de recomendaciones para acabar con uno de los problemas más alarmantes entre la población infantil, y que resulta especialmente preocupante en los países en vías de desarrollo.
>>Ver curso de EXPERTO EN NUTRICIÓN INFANTIL
Según el informe, son los entornos, resultado de la globalización y la urbanización, los que están alentando el aumento del peso y el desarrollo de la obesidad entre los niños. Y es un asunto de primer plano porque “impacta en la calidad de vida del niño, afecta a su estado físico, psicológico, su capacidad de estudio, de relacionarse”, según afirma Sania Sishtar, copresidente de la Comisión y que publica La Vanguardia.
El consumo de alimentos poco saludables, la vida sedentaria delante de la pantalla y la falta de actividad física son las principales causas de obesidad infantil
Los resultados son que entre 1990 y 2014, el número de niños afectados con obesidad ha aumentado de 31.000.000 a 41.000.000 en todo el mundo. El sobrepeso en los países de bajos y medios ingresos se ha duplicado en ese período, pasando de 7,5 a 15,5 millones. Y el número de niños con sobrepeso menores de cinco años en África casi se ha duplicado desde 1990 (de 5,4 a 10,3 millones).
Las seis recomendaciones de la OMS
El paso para acabar con la obesidad entre la población infantil que propone la comisión consta de seis recomendaciones. La primera de ellas es promover el consumo de alimentos saludables, al tiempo que se combate (mediante la imposición de tasas en su comercialización) la ingesta continuada de bebidas azucaradas y grasas saturadas durante la infancia y la adolescencia.
Una de las características de la sociedad de hoy es el sedentarismo, asociado a largos periodos de tiempo en frente de una pantalla. Los autores del estudio proponen la inclusión de programas orientados a aumentar la actividad física, la adopción de buenos hábitos de descanso y un entretenimiento basado en el uso de dispositivos móviles controlado.
>>Ver curso de EXPERTO EN NUTRICIÓN DE LA PRÁCTICA DEPORTIVA
Combatir la obesidad y el sobrepeso puede llevarse a cabo mucho antes del nacimiento del niño. El control de los niveles de hipertensión e hipoglucemia durante el embarazo, la monitorización del incremento de peso durante el embarazo y poner atención a llevar una buena alimentación tanto en el padre como en la madres incluso antes de la concepción son algunas de las recomendaciones que hacer el organismo internacional.
La elaboración de guías que provean a las familias de recursos sobre un estilo de vida saludable, así como llevar un control del peso; una apropiada educación nutricional y en temas de salud y elaborar una dieta saludable especialmente dirigida a la primera infancia, poniendo el foco en que los niños crezcan incluyendo hábitos de vida saludables completan las recomendaciones.
Más información:
Ending Childhood Obesity (pdf)