Un 26,8% de los universitarios españoles tiene en mente crear un negocio o lo ha creado ya, una cifra que supera al porcentaje de estudiantes que desea trabajar en una administración y que se sitúa en el 25,2%. Estas cifras, recogidas en el estudio ‘¿Y después de la universidad, qué?’ echan por tierra la teoría que indica que los universitarios sueñan con ser funcionarios.
Los estudiantes que pretenden ser empresarios son, principalmente, los que estudian una carrera de Ingeniería o Arquitectura, mientras que en el lado opuesto de la balanza se encuentran los universitarios que pertenecen a la rama de Humanidades o Ciencias de la Salud. Por otro lado, cuando se les pregunta a los jóvenes los sectores de trabajo en los que se ven como funcionarios, los mayoritarios son Educación y Sanidad.
Los investigadores que han realizado este estudio, encargado por Educa2020 y Fundación AXA, creen que la crisis, la escasez de oportunidades laborales y el dominio de las nuevas tecnologías son las responsables del ascenso del espíritu emprendedor. Entre los que piensan convertirse en emprendedores, un 18,8% pretende crear su propia empresa, un 1,2% opta por continuar con el negocio familiar y u 3,4% quiere ser autónomo.
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Se da la circunstancia de que en Madrid, la tasa de jóvenes que quieren emplearse como funcionarios es 10 puntos inferior a la media nacional. En cambio, la mayoría de los jóvenes encuestados de Murcia, Galicia, Aragón y Andalucía aspiran a trabajar en una Administración. Las motivaciones para dirigirse hacia uno u otro camino dependen de dónde viva el encuestado. Para andaluces y castellanomanchegos el objetivo es la seguridad laboral, mientras que canarios y madrileños valoran ser su propio jefe, y los cántabros aspiran a trabajar en otro país.
En general, el estudio demuestra que el universitario en España pretende ser asalariado del sector privado, preferiblemente trabajando en una multinacional, lo que se convierte en el sueño de un 22,6% de los jóvenes encuestados (un 30% en el caso de los madrileños). Un 11%, en cambio, prefiere trabajar en una pequeña y mediana empresa. Los sectores profesionales preferidos son servicios profesionales, marketing, publicidad y diseño, ingeniería, comercio y salud.
Por otro lado, el estudio refleja que nueve de cada diez estudiantes que se plantean emprender estudian en una universidad pública. Asimismo, un mayor nivel de estudios se relaciona con mayor predisposición al emprendimiento, así como tener padres empresarios. Sin embargo, la falta de financiación es la principal dificultad que tienen los jóvenes empresarios, unido a las trabas administrativas.