«Hice una carrera, después un máster y estuve meses buscando empleo en mi área, pero ahora trabajo en una cafetería para poder pagar mis gastos». Es la realidad de miles de jóvenes hoy en día. De hecho, España es el país de la Unión Europea con más sobrecualificación: el 36% de los graduados superiores españoles ocupa una posición inferior a su nivel de estudio.
Así lo expone el último informe de la Fundación CYD. Apunta a que, en los grupos ocupacionales de baja cualificación, el 13,4% trabaja como contable, administrativo y otros empleos de oficina, y un 11,2% en la restauración, como vendedor o similar. Para ellos, los expertos consideran que es necesario dotar de más flexibilidad y autonomía a las universidades, para que adecúen sus titulaciones a las necesidades del mercado laboral.
¿Qué es la sobrecualificación?
La sobrecualificación se produce cuando una persona posee mayor cualificación de la que se necesitan para desempeñar un puesto de trabajo. En algunas sociedades, como en este caso en España, la sobrecualificación aumenta porque el porcentaje de licenciados universitarios crece más rápido que la proporción de empleos adecuados a ese nivel de estudios.
Otra razón es que muchos estudiantes eligen carreras universitarias con poca demanda en el mercado laboral. Por lo que, al finalizar los estudios, se ven forzados a aceptar trabajos inferiores a su cualificación.
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Oferta y demanda
Entre los empleos de alta cualificación, el 6% de los graduados ocupa puestos de directores y gerentes, el 41% desarrolla puestos de técnicos, científicos e intelectuales, y el 17% forma parte del grupo de técnicos y profesionales de apoyo.
España es el cuarto país de la UE con un porcentaje menor de ocupaciones de alta cualificación (35,5% frente al 42,4%). El desajuste entre oferta y demanda de empleo más elevado en España en la alta cualificación se dio en el grupo de directores y gerentes, mientras que los profesionales de la salud sufrieron menores desajustes, seguidos de los supervisores en ingenierías de minas, de industrias manufactureras y de la construcción y los profesionales de las tecnologías de la información.
El informe señala que, en comparación con la UE, España presenta un mayor déficit de ocupados en el grupo de profesionales y técnicos de ciencia, ingeniería y tecnologías de información y comunicación, así como en la administración y la empresa. En estos dos grupos en los que se observa la mayor sobrecualificación en España en comparación con la UE. En este sentido, el desajuste entre oferta y demanda señala que quizá la distribución de los titulados superiores por ámbito de estudio no se corresponde con la que necesitaría la estructura productiva del país.
Estudios con mejor y peor inserción laboral
Los graduados universitarios españoles presentan mayor tasa de empleo y menor tasa de paro que los egresados en ciclos formativos de grado superior. De los que trabajan, hay más graduados con jornada laboral completa, no sobrecualificados y con un salario a partir de 1.500 euros netos mensuales.
Los títulos universitarios con mejores indicadores de inserción laboral son la ingeniería, la industria y la construcción, seguido de informática y la salud.
En cuanto a los ciclos formativos de grado superior de Formación Profesional, destacan los datos de inserción laboral de las áreas de instalación y mantenimiento, fabricación mecánica, informática y comunicaciones o electricidad y electrónica.
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El informe también resalta que ingeniería, industria y construcción e informática han visto disminuir el número de egresados en las dos últimas épocas. En cambio, artes y humanidades o servicios, con deportes y turismo a la cabeza, que no presentan tan buenos indicadores de inserción laboral, han aumentado sus graduados. La falta de información o la vocación pueden estar detrás de este hecho.
Formación permanente
Por último, el informe recoge datos sobre la formación permanente en la población, en los que España se sitúa a la cabeza de la UE y presenta el incremento más elevado de Europa. Los graduados superiores (23,2%) se interesan más por la formación permanente que la población general (14,4%). Las mujeres superan a los hombres y los jóvenes a los mayores en cuanto a formación permanente se refiere.
España fue el país de la Unión Europea con mayor porcentaje de trabajadores graduados superiores en posiciones profesionales que no son de alta cualificación: un 36,1% frente a un 22,1% del conjunto de la media europea @Fundacion_CYD https://t.co/DdO6QKjG8a pic.twitter.com/TKD8AnqB8b
— Ismael Sanz (@sanz_ismael) February 23, 2023