Muchas personas tienen que viajar fuera de su ciudad para trabajar y encontrar un empleo. Las nuevas tecnologías han posibilitado poder optar a puestos de trabajo fuera de la capital de residencia sin tener que gastar una importante suma de dinero en desplazamientos hasta los centros de trabajo para hacer las entrevistas del proceso de selección. Y es que cada vez es más habitual hacerlas a través de Skype. Sin embargo, no hay que olvidarse de que para superar la prueba con éxito hay que dominar las técnicas de las entrevistas a través de este medio.
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De hecho, la preparación de la entrevista tiene que comenzar antes de que se produzca la misma y se inicia con la creación de un usuario. Un nombre que es importante porque es la primera impresión que se va a causar al reclutador, de manera que debe indicar profesionalidad.
Además, es importante avisar a los amigos o personas con las que se contacte con más frecuencia de la hora a la que se va a producir la conexión para que no haya ninguna interrupción y se cree una mala imagen o se genere alguna distracción.
Los medios técnicos deben estar también bajo control. Es aconsejable utilizar los auriculares más que los altavoces, al ser un medio más fiable y reducir el nivel de ruido que recogen los ordenadores, pero deben tener una apariencia discreta para evitar distracciones o crear una mala imagen.
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Además, es útil instalarse en una sala en la que haya poco ruido y en la que no haya elementos que puedan suponer alguna distracción. Lo más conveniente es un fondo vacío o neutral y en el que no se produzcan sombras por la iluminación para que se vea bien el rostro, pero sin exceso de brillos o de palidez. Siempre es recomendable evitar los espacios públicos.
Por supuesto, la entrevista tiene que prepararse igualmente desde un punto de vista documental, siendo posible tener un currículo impreso a mano por si hay que consultar cualquier dato o bien notas que se hayan preparado con información que se precise.
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Y, al ser un canal diferente, se tiene que ensayar el lenguaje corporal de antemano – puede ser de ayuda hacer una prueba previa con la ayuda de algún amigo- y la imagen que se va a proyectar. En general, algunas pautas que ayudan son colocarse a una distancia media de la cámara y dejar que se vea tanto la mitad superior del cuerpo como lo brazos. También se recomienda que haya un poco de espacio por encima de la cabeza. Otro buen truco es colocar el ordenador sobre unos cuantos libros para que la cámara web quede a la altura de los ojos y se capte bien la imagen.
Y, como en cualquier entrevista de trabajo, hay que pensar bien la ropa que se va a llevar, teniendo que tener en cuenta que hay colores y tejidos que se ven peor en la cámara. De este modo, se recomienda evitar el blanco nuclear, los estampados, los complementos y los accesorios que sean muy llamativos. Por el contrario, las opciones más seguras son los tonos oscuros y neutros.
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Con estos pasos previos, ya se tiene una base para hacer la entrevista por Skype. Pero durante su desarrollo, igualmente hay que seguir una serie de consejos. Uno de los más importantes es mostrar interés ante el entrevistador y mirar a la cámara porque así se demuestra que se está más concentrado en la conversación y parece que se mira a los ojos del reclutador. Nunca hay que poner el foco en la pantalla ni en la imagen que se ve de nosotros.
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También es de utilidad mantener una postura erguida, pero ligeramente inclinada hacia adelante para que el contacto visual sea mayor y el entrevistador pueda ver mejor las expresiones faciales.
En el caso de que haya que leer el currículo o notas que se hayan preparado, hay que hacerlo con discreción para no alterar la conversación natural y dar una imagen positiva en lugar de mostrar que no se está preparado.
Aunque no es habitual, durante la entrevista pueden producirse algunas interrupciones por cuestiones técnicas. En el supuesto de que suceda, lo mejor es pedir con educación que el entrevistador repita la pregunta para escucharla. Si los problemas son mayores, una buena opción es indicar lo que sucede y volverse a conectar para recuperar la comunicación.
Finalmente, hay que saber acabar la entrevista, pero no sin antes haber podido indicar los logros y fortalezas que se tienen para ese empleo. Una vez aportada toda la información por tu parte y que el reclutador quiera finalizar la conversación, es importante agradecer a la persona el tiempo dedicado y preguntar por los siguientes pasos a seguir en el proceso de selección.
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