Aunque la brecha de género se va reduciendo, las mujeres todavía cobran un 16% menos que los hombres, o lo que es lo mismo, en España ellas necesitan trabajar 52 días más de media que los hombres para ganar el mismo salario, una cifra que alcanza los 59 días en Europa. Son datos que se desprenden del informe “Voces contra la precariedad: mujeres y pobreza laboral en Europa”, elaborado por Oxfam Intermón.
>>Te puede interesar: Máster en Asesoría Laboral
Los expertos consideran que parte de esta brecha salarial se debe a factores como la edad de la trabajadora, su experiencia y el tamaño de la empresa, pero un 14% de la brecha solo puede atribuirse a una discriminación por razón de género.
En Europa, de 609 consejeros delegados de grandes empresas, solo 36 son mujeres
Las mujeres son el colectivo que cuenta con salarios más bajos. En 2014, una de cada cinco mujeres experimentó una baja remuneración, frente al 10% de los hombres. De igual manera, si observamos el 10% de la población con salarios más altos, en 2016 solo aparecían en él un 20% de mujeres. En Europa, de 609 consejeros delegados de grandes empresas, solo 36 son mujeres.
Casi cuatro de cada cinco trabajadores a tiempo parcial en Europa son mujeres
La pobreza laboral es un problema que va en aumento en Europa, especialmente en sectores como la asistencia social, el cuidado infantil, la restauración, los servicios de limpieza o la atención al cliente, que son mayoritariamente femeninos. En España, el mismo problema ocurre en sectores como la hostelería, la restauración, el turismo, y el trabajo del hogar.
>>Fórmate y trabaja en HOSTELERÍA | TURISMO | RESTAURACIÓN
Por otra parte, el informe indica que las mujeres tienen el doble de posibilidades que los hombres de estar en un trabajo parcial no deseado. Casi cuatro de cada cinco trabajadores a tiempo parcial en Europa son mujeres.
El perfil de las mujeres que tienen más riesgo de pobreza laboral es el de una persona migrante, joven y que encabeza una familia monoparental. Una de cada cinco trabajadoras migrantes se enfrenta a riesgo de pobreza laboral en Europa y, en España, esta cifra se reduce a una de cada tres.
En España, la mitad de las familias monoparentales está en riesgo de pobreza y de ellas el 83% está encabezado por mujeres. Una de las consecuencias de la precariedad laboral es el estrés y la ansiedad ante la dificultad de llegar a fin de mes.
Por otra parte, el trabajo doméstico no remunerado de las mujeres representa el 13% del PIB mundial, mientras que en España asciende al 41%. Las mujeres europeas dedican una media de 22 horas a la semana al trabajo no remunerado, frente a las 10 horas que dedican los hombres.