Nervios y entrevista de trabajo suelen ir de la mano. Las ganas de deslumbrar pueden jugar una mala pasada, sobre todo cuando se suman preguntas difíciles de responder y que no siempre tienen que ver con tus conocimientos.
Cada vez es más habitual que las empresas planteen cuestiones de lo más variopinto que en teoría sirven para conocer mejor al candidato y evaluar sus habilidades blandas (liderazgo, capacidad de adaptación o trabajo en equipo, por ejemplo).En LinkedIn han identificado las cinco preguntas trampa más repetidas en la entrevista de trabajo y cómo deberías responderlas como un profesional. Son las siguientes.
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Cuéntame algo más de ti
Cuando escuches esta pregunta en la entrevista de trabajo evita hacer un repaso lineal a tu curriculum o listar tus conocimientos. Por el contrario, aprovecha para contar lo que no aparece en el papel, lo que no pone en tu curriculum.
Intenta ser honesto, sucinto y engaging. La clave para lograrlo es prepararse con antelación. Asegúrate de saber qué es lo que busca exactamente la empresa para destacar tus fortalezas alineadas con el puesto.
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¿Cuál es tu mayor debilidad?
Si hay algo que debes evitar en este caso es la falsa modestia con respuestas como ser demasiado perfeccionista. Con esta pregunta el entrevistador busca saber cuál es tu grado de autoconocimiento y alguna traza más de tu personalidad.
Busca alguna situación que exponga esa debilidad y asegúrate de explicar también qué estás haciendo para remediarla.
¿Por qué debería contratarte?
La mejor forma de responder es con tres razones concretas por las que estás cualificado para el puesto. Al contestar intenta dibujar un escenario en el que muestres claramente cómo ayudarás a la empresa, a poder ser con datos concretos de experiencias pasadas.
¿Qué crees que opinan de ti tus compañeros de trabajo?
Una pregunta trampa donde debes ceñirte a cuestiones relacionadas con el puesto de trabajo al que aspiras. Ilustra tu argumento con un caso real, como aquella vez que ayudaste a un compañero de trabajo a sacar adelante el proyecto en el que estaba atascado.
Una buena estrategia para afrontar esta pregunta es trabajar previamente en tus recomendaciones en LinkedIn, de forma que puedes dirigir al entrevistador hacia ellas para recabar más información.
Cuéntame alguno de tus fracasos laborales o errores que hayas cometido en el trabajo
Como en el caso de la segunda pregunta, la mejor respuesta es una que sea honesta. Eso sí, deberás ser capaz de explicar de forma clara y concisa cuál fue el error, qué aprendiste y, si fue posible, qué solución le pusiste.
Preparar las respuestas a las preguntas más difíciles de la entrevista de antemano te dará la confianza que necesitas para afrontarlas. De hecho, es una buena idea ensayar toda la entrevista. Además, tampoco debes olvidarte de hacer tus deberes. En otras palabras, infórmate bien sobre la empresa, su cultura y valores, además de las últimas noticias sobre ella.
Por último, tan importante son las preguntas que te hagan como las que hagas tú. Según los datos de LinkedIn, para un 41% de los entrevistadores es una cualidad deseable que buscan en los candidatos.