Elegir el mejor colegio es una de las principales preocupaciones de los padres. Y es que no es tarea fácil y varios son los aspectos que los progenitores tienen en cuenta a la hora de decantarse por un centro u otro para que sus hijos cursen los estudios. Entre ellos, por ejemplo, figuran los de la reputación del colegio, que los padres en general suelen considerar como muy importante. Un factor que, si es valorado por los progenitores, también contribuye a que se sopesen el rendimiento académico, la distancia entre el domicilio y el centro y la filosofía religiosa, entre otros, según se recoge en los datos de PISA in Focus y publica OECD.
No obstante, los padres también tienden a estar preocupados por que haya un ambiente agradable y que el centro sea seguro y, por supuesto, igualmente se presta atención a las cuestiones económicas, que a veces son una barrera para que los progenitores puedan llevar a sus hijos al colegio que quieren.
Realmente, todos estos aspectos son importantes y son los más habituales que los padres tienen presentes. Pero, no hay que olvidarse de otras claves que pueden ayudar a dar con la respuesta más adecuada, según lo que los deseos de los progenitores y lo que más valoran de los centros, ni de todos los elementos de cada uno de los factores anteriores.
1. Conocer el centro: es importante que los padres sepan bien cómo es el colegio para lo que es de utilidad asistir a las jornadas de puertas abiertas que habitualmente se organizan y en las que, además, se posibilita que se resuelvan todas las dudas que se tengan.
Los progenitores igualmente deben conocer bien las instalaciones del centro para poder organizarse mejor, sobre todo, si tienen que dejar al niño a comer en el comedor escolar. En este caso, lo mejor es fijarse en si tienen cocina propia o bien se presta un servicio de catering. Igualmente, hay que cerciorarse de si hay auditorio para hacer actividades culturales, instalaciones deportivas o zonas al aire libre, entre otras.
2. Jornada: uno de los aspectos que los padres tienen que tener muy en cuenta es si el centro tiene o no jornada intensiva con el fin de poder compaginar los horarios y facilitar la conciliación de la vida laboral y profesional.
3. Aprendizaje: el método pedagógico también debe ser valorado por los progenitores para que el niño reciba la formación adecuada y permita el desarrollo de sus habilidades y competencias a través de un sistema de aprendizaje con el que se sienta cómodo y encaje.
4. Idiomas: no hay que olvidarse de las lenguas extranjeras ante el auge y la creciente importancia de saber idiomas. Es vital conocer si el centro apuesta por este tipo de formación y si se imparten clases en otras lenguas y en cuáles de ellas. Evidentemente, el inglés no puede faltar.
5. Religión: aunque muchos padres tienen claro si quieren un colegio religioso o laico, no hay que pasar por alto este aspecto para que la formación en este campo que reciben en casa y en la escuela sea uniforme, vaya en la misma dirección y no genere controversias en el niño.
6. Distancia: es igualmente decisiva. Hay que valorar si es mejor que el colegio esté más cerca de la vivienda que del centro de trabajo o viceversa, si el niño va a tener que coger un autobús público o bien hay servicio de transporte propio de la escuela… Todos estos horarios tienen que controlarse para evitar problemas y poder conciliar vida laboral y profesional.
7. Servicios: otro de los factores que es conveniente sopesar son los servicios que ofrece el colegio como, por ejemplo, el de biblioteca o el banco de libros, ya que puede suponer un ahorro económico importante para los padres.
También hay que prestar atención a las actividades extraescolares para conocer cuáles se imparten y pueden ser más interesantes, además de saber si se realizan o no dentro del mismo centro y el horario que tienen para no caer en incompatibilidades con la jornada de los padres. Asimismo, no hay que olvidarse de valorar si tienen servicios para el verano u otras fiestas como la Semana Santa.
8. Ambiente: con la creciente violencia en las aulas y el acoso escolar, un punto clave para elegir el colegio es el ambiente que hay en él. Pero no sólo hay que fijarse en este aspecto, sino también si se favorece la socialización para que el niño pueda hacer amigos y relacionarse para lo que es de ayuda que se asista a un centro educativo en el que él se vea como un igual.
9. Precio: aunque está en la décima posición, no es cuestión baladí. El coste del colegio es un factor que los padres tienen que sopesar muy bien para poder afrontar todo el proceso formativo sin problemas. Y aquí hay que sumar desde lo que cuesta la mensualidad en un colegio público o concertado, el comedor, libros, uniformes, actividades extraescolares, excursiones, transporte…
Aunque se solicite beca, como es un recurso que queda sujeto a la concesión, no es bueno hacer las cuentas pensando que se va a disponer de esa cantidad para que, en caso contrario, no haya sorpresas y se produzcan dificultades.
10. Asistentes: cuando los niños son pequeños y se trata de la primera escolarización es vital saber si hay personal para cambiar al niño si se hace sus necesidades. En caso contrario y según el trabajo de los padres y la distancia al centro, pueden generarse importantes problemas.
Y, sobre todo, un último consejo: no hay que precipitarse al tomar la decisión, siendo conveniente sopesar todos los pros y contras de cada centro y valorar a su vez las posibilidades reales de que el niño sea admitido en ese colegio.