A la hora de escribir un texto hay que tener en cuenta aspectos como para quién escribes, cuál es la finalidad, qué genero vas a utilizar y cómo vas a lograr que sea coherente, esté bien cohesionado y sea correcto. Por todo ello, los expertos consideran que escribir no es tarea fácil.
Teodoro Álvarez Angulo, profesor titular del Departamento de Didáctica de la Lengua y la Literatura de la Facultad de Educación de la UCM, recoge en un artículo consejos sobre cómo escribir, editar y exponer en público textos académicos. Estos textos explicativos, los que con mayor frecuencia encuentran los estudiantes, exponen información en diferentes campos, pero para el autor resulta curioso que no se enseñe a escribirlos y a comprenderlos, es decir, a ayudarles a aprender.
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Existen diferentes fases que se recomienda seguir a la hora de escribir un texto académico. La primera es tener claro cómo organizar la información. Existen diferentes maneras, y conocerlas y saber aplicarlas ayudará a que los textos se comprendan más fácilmente. Asimismo, conviene conocer las principales expresiones, palabras y marcas lingüísticas y textuales que aparecen regularmente en estos textos.
En cuanto a los pasos para aprender a escribir textos académicos, el primero es contextualizar el proyecto de escritura. En esta fase es conveniente elaborar una ficha de registro en la que se haga constar el tema elegido, el destinatario y la intención, lo que se sabe sobre el tema y cómo se piensa difundir, entre otras cuestiones.
El siguiente paso gira en torno a las necesidades de documentación y conocimiento del género, es decir, qué queremos saber sobre el tema y cómo lo vamos a transmitir. Para ello seleccionaremos fuentes de información y la información en sí.
El tercer paso es organizar la información a través de mapas conceptuales, esquemas y resúmenes, lo que da pie al cuarto paso que es la producción del texto hacia el primer borrador o texto intermedio, con una redacción provisional.
A continuación, la revisión del texto. Para realizar esta función correctamente es necesario identificar los problemas textuales y resolverlos mediante reescritura, utilizando, si son necesarias, guías de ayuda. Para entender mejor los mecanismos de revisión en escritura puede ser útil la idea de la poda o de pulir, lo que nos llevará a conseguir el texto definitivo.
El último paso es la edición en el formato correspondiente, y la exposición y defensa del documento en público. En este paso dejamos atrás nuestra labor como escritores para adentrarnos en la de conferenciantes, que exponen oralmente la información que se ha escrito y aprendido previamente.
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Pasos para aprender a escribir, a editar y a exponer en público textos académicos