El porcentaje de jóvenes que ni estudian ni trabajan ha aumentado al 17,3%. Los expertos señalan que el aumento de los ninis (ni estudian ni trabajan) se debe a un contexto de caída generalizada de empleo como consecuencia de la pandemia del Covid-19.
A la falta de expectativas laborales se le unen otros factores, como la desesperanza y la falta de información. En este sentido, Administración, profesores y familia deben ir al unísono en momentos clave de la vida de un estudiante, como es el cambio de ciclo.
Ayudar a los hijos a elegir estudios se considera fundamental para que el abandono escolar no se materialice y los jóvenes puedan encontrar una formación acorde a sus expectativas y necesidades. Estas son algunas de las dudas que se plantean las familias que tienen en casa a un joven que no sabe qué estudiar:
¿Debo escoger lo que se me da bien o lo que me gusta?
Es necesario que haya un equilibrio entre las habilidades y los gustos del joven. Dedicarse a algo que se te da bien pero no te satisface no resulta lo más conveniente, y al contrario ocurre lo mismo. En cualquier caso, los gustos del joven siempre se tienen que tener en cuenta y la aptitud siempre puede trabajarse teniendo claro que la recompensa final es la consecución del futuro laboral deseado.
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¿Puede ayudar el centro educativo?
Los centros educativos cuentan con profesionales capaces de hacer pruebas psicométricas de intereses vocacionales que pueden ayudar a un joven indeciso a encaminar su futuro profesional. Además, existe la posibilidad de mantener entrevistas personalizadas de asesoramiento. Por otro lado, consultar a un profesor de confianza puede ser el primer paso para aclarar las dudas.
¿Deberían los padres implicarse en la elección?
Teniendo en cuenta la trascendencia de esta decisión, los padres deben involucrarse, ayudando al joven a tomar una decisión, pero nunca imponiendo criterios. Es muy probable que si los padres eligen los estudios, el joven los termine abandonando prematuramente.
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¿Por dónde empiezo a tomar la decisión?
Cualquier decisión de trascendencia debe ser fruto de la reflexión. Algo que debe plantearse el joven, y en lo que le pueden ayudar sus padres, es qué es para él el éxito. Aunque para muchas personas puede ser ganar mucho dinero, para otras muchas será la realización personal o la posibilidad de aportar a la sociedad. Una de las formas para elegir y no equivocarse es satisfacer las propias aspiraciones o anhelos.
¿Cuál es la fórmula perfecta?
A la hora de elegir estudios hay que tener en cuenta gustos, intereses personales y el talento de cada persona. Profundizar en qué aspecto pesa más de esta fórmula y decantarse por una formación encaminada a satisfacer estas motivaciones siempre es una apuesta segura.
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