Subir contenido a las redes sociales ha pasado de ser una simple moda a convertirse en el medio principal de vida para muchos españoles. Alrededor de 7.500 personas viven de subir contenido a sus historias de Youtube, Instagram o TikTok.
Esta moda ha trascendido más allá del mundo de los adultos y cada vez son más los menores que desean convertirse en Gamers, Youtubers o Tiktokers y vivir de los ingresos que les reportan estas nuevas profesiones.
Según el estudio ‘¿Qué quieres ser de mayor?’ elaborado por Qustodio, la profesión de YouTuber aparece como la cuarta más deseada por los niños de entre 4 y 16 años en una muestra de 2.000 menores.
Esta investigación apunta que, a las profesiones tradicionales, se han sumado ahora muchas nuevas profesiones ampliamente ligadas a la tecnología, como la de programadores, analistas de datos, diseñadores UX/UI, pero también creadores de contenidos para plataformas como Youtube, Instagram, TikTok o Twitch, entre otras.
Este cambio de tendencia va ligado, entre otras cuestiones, a que cada vez es mayor el uso que los menores hacen de las nuevas tecnologías, especialmente de las redes sociales pues, según revela este informe, durante el último año ha aumentado un 76% el tiempo de uso que los menores dedican a las redes sociales.
Según apunta Eduardo Cruz, CEO y co-fundador de Qustodio, «estos datos son una clara muestra de la situación actual. Los menores pasan más tiempo en las redes sociales consumiendo contenido que crean los influencers y estos se convierten en modelos a seguir”.
Por ello, reconoce que es normal que nuestros hijos quieran este tipo de rol, ya que la vida que se muestra en las redes es idílica y utilizada como anzuelo de marketing, pues que tu trabajo sea jugar a videojuegos o viajar alrededor del mundo motiva más que un trabajo de 8 a 5, apunta este experto.
El sueldo de ser influencer
El negocio de la publicidad en redes sociales crece incesantemente años tras año, y sólo en 2020 este sector facturó cerca de 8.200 millones de euros.
Por ello, no es de extrañar que la profesión de influencer se haya convertido en tan sólo unos años en uno de los trabajos mejor pagados pues, según revela el informe Influencer Marketing Hub, un profesional del contenido en Instagram puede llegar a ganar entre 4.000 y 8.000 euros por post, y un mega-influencer profesional nuca aceptaría menos de 8.000 euros por anunciar un contenido profesional en su perfil social.
Según apunta este mismo informe, en YouTube un nano-influencer puede ganar entre 16 y 160 euros por contenido publicitado, y un mega-influencer puede llegar a ingresar más de 16.000 euros por cada mención en su perfil.