Buenas noticias para los estudiantes extranjeros que estén formándose en Reino Unido. El Gobierno británico acaba de anunciar la ampliación del período que hasta ahora estaba permitido para que los graduados permanecieran en el país.
La normativa actual permite estar cuatro meses sin tener un empleo cualificado
En concreto, la medida afecta a los estudiantes de terceros países que podrán estar hasta dos años en el Reino Unido, aunque no hayan encontrado un empleo cualificado. Un período que se ha ampliado considerablemente porque, hasta ahora, solo era posible seguir viviendo en el país durante cuatro meses sin ese puesto de trabajo cualificado.
Además, la nueva normativa también abre las puertas a que los estudiantes estén en el Reino Unido sin empleo o bien trabajen a cualquier nivel –incluyéndose las tareas mal remuneradas o no relacionadas con su formación-, pasando posteriormente a obtener un visado de trabajo cualificado cuando encuentren el empleo que cumpla con los requisitos.
Y otro aspecto que favorece a los estudiantes de terceros países es la ausencia de un número máximo de alumnos que podrán acogerse a este itinerario. Un elemento que supone una importante novedad porque se calcula que alrededor de 450.000 estudiantes extranjeros estudian en el Reino Unido anualmente, aunque la tercera parte procede de la Unión Europea.
Este anuncio del Gobierno de Boris Johnson supone un cambio importante en la política que en los últimos años se había seguido en el Reino Unido, ya que la exprimera ministra Theresa May introdujo medidas contra la inmigración ilegal –se incluían los estudiantes extranjeros sin puesto de trabajo cualificado y con salario inferior a las 20.800 libras anuales-, cuando fue ministra de Interior en el año 2012.
La política de May, junto con el entorno hostil alrededor del Brexit o salida del Reino Unido de la Unión Europa, ha tenido como consecuencia la bajada del número de extranjeros que estudian el país y que constituyen una importante industria al generar entre 23.000 y 29.000 millones de euros anuales.
No obstante, todavía habrá que esperar para beneficiarse de esta medida, ya que la nueva normativa entrará en vigor en 2020. Además, se aplicará a aquellos alumnos que empiecen a estudiar un grado o un curso de nivel superior a partir del año que viene en una universidad de confianza del país o bien en un centro superior que tenga un historial probado de que se ha venido cumpliendo con los controles migratorios.
Y, también habrá que dar tiempo para ver el efecto de la medida, ya que se calcula que entre 170.000 y 185.000 alumnos se gradúan cada año en el Reino Unido aunque, de acuerdo con los últimos datos de 2018, alrededor de 6.300 recibieron autorización para seguir en el país con permiso de trabajo y solo 450 consiguieron empleos de alta calidad y especialización.