Encuentra tu curso ideal

9%

¿Qué quieres estudiar?

Redes neuronales del cerebro. | Foto de vecstock vía Freepik

Foto: Redes neuronales del cerebro. | Foto de vecstock vía Freepik

La habilidad del lenguaje hablado comienza a decaer a los 40 años según la Universidad de Iowa

La eficacia con la que las personas reconocen las palabras habladas depende tanto del cerebro como de la audición, según investigadores norteamericanos.

Nuestra capacidad para comprender un discurso hablado puede depender más de nuestro cerebro que de nuestros oídos. Así se deduce de un estudio elaborado por la Universidad de Iowa (EE.UU.), que revela la rapidez con la que las personas identifican correctamente las palabras habladas a lo largo de su vida.

A partir de los 40 años la habilidad del lenguaje hablado comienza a decaer, una edad más temprana de lo que se pensaba.

El estudio concluye que la velocidad con la que las personas entienden las palabras que escuchan alcanza su punto máximo entre los 20 y los 30 años, lo que sugiere que el periodo de desarrollo de las habilidades lingüísticas es más largo que lo que se sospechaba.

>> Ver Cursos de Trastornos del Habla y del Lenguaje.

¿Cuestión de edad?

Los mayores son, como cabía esperar, más lentos a la hora de reconocer las palabras habladas, pero ni la capacidad auditiva ni la cognitiva lo explicarían. Los investigadores creen al respecto que puede ser debido a procesos cognitivos que se utilizan para apoyar el lenguaje que pueden variar de un individuo a otro a lo largo de su vida.

Los científicos reconocen que hay diferentes cuestiones que aún no tienen respuesta en algo tan sencillo como el hecho de reconocer las palabras en personas adultas. Para probar su hipótesis de que este reconocimiento tiene que ver con la audición se estudió el comportamiento de mayores con poca o ninguna discapacidad auditiva. Sin embargo, incluso después de eliminar los efectos de la audición, los investigadores encontraron que la velocidad de procesamiento del lenguaje variaba hasta un octavo de segundo en una palabra corta como “gato”.

Por lo tanto, los científicos concluyen que no es una cuestión de precisión. Los mayores llegaban a la palabra correcta, pero en un tiempo variable. El problema es que cuando hay un retraso en una palabra, este se multiplica al añadir más, lo que pasa en una oración o durante una conversación.

Velocidad en el reconocimiento de palabras

En las investigaciones, por tanto, no se ha podido explicar por qué los adultos difieren en el reconocimiento de las palabras habladas. Una posibilidad que podría explicar esta diferencia en la velocidad de procesamiento del lenguaje podría ser cuánto socializa la persona. Quizá los más eficientes sean personas que están conectadas socialmente y que tienen encuentros regulares con otras personas. Esto les permite mantener sus habilidades de procesamiento cognitivo frente a las que presentan un deterioro de esta habilidad por un posible distanciamiento social.

Las personas alcanzan una capacidad máxima de vocabulario de aproximadamente 30.000 palabras alrededor de los 40 años.

Para establecer conclusiones se invitó a los participantes de entre 11 y 78 años a sentarse frente a la pantalla de un ordenador en una cabina insonorizada, donde escuchaban una palabra, que tenían que hacer coincidir con una imagen en la pantalla. Al menos una de las ilustraciones mostrada era una palabra con un sonido similar a la palabra que escuchaban.

Utilizando tecnología de seguimiento ocular los investigadores determinaron cuánto tiempo le llevaba a cada participante identificar y hacer clic en el icono de la palabra correcta.

En otro estudio efectuado en niños se comprobó que la velocidad en el reconocimiento de palabras habladas iba mejorando hasta los 20 años y en algunos casos hasta los 30. Pero hacia los 40 años, y de ahí en adelante, empezaba a declinar.

Hasta el momento no se ha podido establecer por qué, aunque se sabe que las personas alcanzan una capacidad máxima de vocabulario de aproximadamente 30.000 palabras alrededor de los 40 años, lo que podría significar un punto de inflexión.

aprendizaje audición cerebro estudio lenguaje