Fundación Telefónica ha presentado la publicación “Viaje a la Escuela del Siglo XXI. Así trabajan los colegios más innovadoras del mundo”, que cuenta la experiencia del investigador y psicólogo Alfredo Hernando Calvo, quien ha recorrido los cinco continentes en busca de las escuelas más innovadoras.
“El mundo está lleno de escuelas donde las notas tienen otro sentido, los horarios cambian, y las aulas y los pasillos son el escenario de actuaciones nuevas. Son escuelas transformadas por el avance de la tecnología y del conocimiento, la neurociencia, las teorías psicológicas y pedagógicas, y los cambios sociales”, señala Hernando.
De los 50 colegios que recoge el estudio, cuatro son españoles. Se trata de centros que han conseguido mejorar el proceso educativo a través de un proyecto de innovación integral que se manifiesta en pequeñas acciones cotidianas.
El libro de la Fundación Telefónica propone 80 acciones concretas para que los centros puedan convertirse en escuelas del siglo XXI. El estudio se estructura en 15 capítulos que resumen aspectos relevantes del proceso de enseñanza, como las inteligencias múltiples, las aulas cooperativas, el aprendizaje por proyectos, la gamificación, las estrategias de pensamiento aplicadas al aula, las técnicas más eficaces de evaluación, la reorganización de espacios y horarios, el aprendizaje blended, los aprendizajes presenciales combinados con el e-learning y la integración de la escuela en la comunidad.
Entre las escuelas que se destacan se encuentran las Escuelas Barco, promovidas por la organización Shidhulai en el Golfo de Bengala, en Bangladés. Allí la escolarización se adapta al calendario de cosechas. En los Barefoot College, en India y Sierra Leona, las escuelas son entendidas como comunidades de aprendizaje, y no hay exámenes ni certificados, pero sí clases nocturnas y orientadas a las necesidades reales de aprendizaje de los alumnos.
En la Escuela Nueva, de origen colombiano y con la presencia en muchos países de Latinoamérica, los alumnos van asumiendo el rol de profesor y se promueve una participación activa y autónoma. En Copenhague, la Ørestad Gymnasium ocupa un edificio vanguardista y ofrece un horario especial, con cuatro módulos de 100 minutos cada uno, con el fin de obtener el máximo partido de cada alumno.
Aletheia, en Buenos Aires, las herramientas de aprendizaje se mezclan con elementos de la naturaleza y se potencia la creatividad, mientras que el Colegio Montserrat de Barcelona ofrece a los estudiantes de Secundaria el LeaderLab, donde vida y aprendizaje van de la mano gracias a la personalización del currículum.
En Madrid, el Centro de Formación Padre Piquer es pionero en la creación de súper-aulas cooperativas donde se juntan dos clases atendidas por tres profesores. De esta manera se consigue que el alto índice de alumnos inmigrantes esté integrado en los diferentes proyectos al trabajar en grupos.
En Nueva York, la Tienda de Suministros para Superhéroes incluye un programa de apoyo escolar con tutorización personalizada atendida por voluntarios, mientras que en Finlandia, Innoomia es una escuela en la que prima el aprendizaje por proyectos y las estrategias de blended learning. Por su parte, Kedi, en Corea del Sur, está aplicando la integración tecnológica para la implementación de programas de personalización del aprendizaje.
Más información:
Viaje a la escuela del siglo XXI, de la Fundación Telefónica