Cuando hablamos de estrés, lo primero que nos viene a la mente es pensar en situaciones tensas o amenazantes que suelen hacernos sentir nerviosos, irritados o frustrados. Sin embargo, se ha comprobado que ‘podemos darle la vuelta a la tortilla’ y convertir una situación de estrés en algo beneficioso para alcanzar nuestras metas y objetivos.
Esta es la principal conclusión a la que ha llegado Kelly McGonigal, una psicóloga de la Universidad de Standford que se ha alzado como defensora del estrés, ya que asegura que podemos aprender a manejarlo y sacar beneficios muy provechosos del mismo.
Según esta experta, el estrés puede hacernos más felices, puede hacernos sentir más saludables e, incluso, puede llevarnos a pensar que somos más capaces de lograr nuestras metas, siempre y cuando lo afrontemos de una forma adecuada y mantengamos una actitud positiva.
Una vez que hemos conseguido transformarlo en estrés positivo o ‘eustrés’, éste nos ayudará a enfrentarnos a nuestros problemas, nos ayudará a ser más creativos incluso, según manifiesta esta psicóloga, nos hará tomar la iniciativa y responder de una forma más eficiente a las situaciones que lo requieren.
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Esta experta pone como ejemplo a dos alumnos que se ponen nerviosos antes de un examen y sienten la sensación de estrés. En su opinión, el estudiante que está centrado en aliviar la tensión y alejar el estrés, se descentrará de su objetivo principal (que es el examen) y sacará peor nota. Sin embargo, el estudiante que no percibe el estrés como un obstáculo y se centra exclusivamente en su objetivo (el examen), obtendrá un mejor resultado que el anterior.
Claves para trasformar el estrés
Según esta psicóloga, existen algunas claves para conseguir trasformar el estrés negativo en ‘eustrés’ o estrés positivo como, por ejemplo, aprender a convertir los nervios propios que genera el estrés en excitación o en un nerviosismo positivo. Con este cambio de actitud, conseguiremos que el estrés se ponga de nuestra parte y lo convertiremos en una eficaz herramienta para superar nuestros retos.
Otra de las claves, es aprender a mirar el estrés como algo positivo, y no como una circunstancia que nos absorbe toda la energía. También es necesario, según esta experta, aprender a ver el estrés como una oportunidad para conectarnos con los demás y saber compartir el estrés con esas personas que también lo sufren.
También es conveniente aprender a ver la situación de estrés como una oportunidad de crecimiento personal. Según los expertos, esto nos ayuda a mejorar nuestra respuesta ante el estrés físico, así como a aumentar la esperanza ante el problema y a sentirnos más felices.
Finalmente, esta psicóloga recomienda no dejar que el estrés nos convierta en lo peor de nosotros mismos. Para ello, aconseja cambiar la tendencia autodestructiva que nos genera el estrés, por una tendencia más positiva y productiva.