La LOMLOE es la nueva Ley de Educación que acaba de ser aprobada en el Congreso, es la octava de la democracia. Estas son las claves más destacadas del proyecto de Ley Orgánica o «Ley Celaá».
El castellano: desaparece como «lengua vehicular» en la enseñanza y las Administraciones deberán garantizar el derecho a formarse tanto en castellano como en lenguas cooficiales. Así, por ejemplo, la asignatura de Lengua Cooficial y Literatura pasará a llamarse Lengua Propia y Literatura.
Centros concertados: ya no podrán recibir cuotas de las familias por recibir enseñanzas de carácter gratuito ni tampoco imponer aportaciones a asociaciones o fundaciones.
Educación especial: serán los propios centros ordinarios los que atenderán a alumnos con discapacidad en un plazo de diez años. Por su parte, la Administración apoyará a aquellos alumnos con atención muy especializada.
Religión: los centros deberán ofertar esta asignatura de manera obligatoria, pero la nota no contará para becas ni para el acceso a la Universidad. En Primaria y Secundaria se podrá dar la asignatura no confesional de cultura de las religiones.
Digitalización: se contempla el desarrollo de competencias digitales en todas las etapas educativas.
Segregación de alumnos e igualdad de género: aquellos centros sostenidos con fondos públicos, ya sea de forma parcial o total, no podrán separar a alumnos por sexo. Por otra parte, se impulsará el incremento de alumnas en estudios científicos y tecnológicos, así como de alumnos en estudios con mayor presencia femenina.
Educación Infantil: se promoverá un aumento de las plazas públicas de 0 a 3 años e incorporación de esta etapa en otros centros públicos.
Certificación en Secundaria y diversificación curricular: los alumnos que terminen ESO recibirán una certificación oficial con los años cursados y el nivel de las competencias. Se podría realizar la adaptación del currículo desde tercer curso de Secundaria para el alumnado que lo requiera con el fin de que consiga el título de ESO.
Repetir curso: los alumnos podrán pasar de curso con hasta dos materias suspensas, si el equipo docente así lo considera. El alumno podrá repetir curso hasta dos veces a lo largo de Primaria y Secundaria.
Bachillerato: se establece la posibilidad de cursarlo en tres años y la opción de obtener el título con todas las materias superadas salvo una, a criterio del equipo docente.
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Educación de adultos: podrán acceder quienes hayan cumplidos los 16 años y tengan un contrato laboral, así como deportistas de alto rendimiento.
Alumnos sin cualificación: las Administraciones podrán organizar programas para mayores de 17 años sin cualificación para permitirles un título de FP o certificación académica.
Currículo: los contenidos básicos de las enseñanzas mínimas fijadas por el Ministerio de Educación no supondrán más del 50% de los horarios para aquellas regiones con lengua cooficial, ni más del 60% para el resto de las Comunidades Autónomas.
Educación para la salud: se fomentará la educación para la salud, incluida la afectivo-sexual, desde Primaria.
Docentes: se regulará la formación inicial y permanente de los docentes en el plazo de un año desde la aprobación de la Ley, así como el acceso y desarrollo de su profesión.
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