La respuesta se hace esperar. Después de realizar una entrevista de trabajo, las horas parecen días y los días se alargan como semanas mientras llega esa ansiada llamada con una oferta formal.
Mientras tanto, es posible analizar ciertos elementos que son clave para intuir si hay o no posibilidades de recibir una respuesta positiva. “Aunque nunca se puede estar del todo seguro, y no hay que hacerse ilusiones antes de tiempo, sin duda hay indicios que podrían indicar que estás a punto de recibir buenas noticias”, explica Michael Kerr autor del libro “La ventaja del humor”, según recoge el portal INC.com en un artículo.
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Uno de los primeros aspectos sobre los que hay que detenerse es: ¿se extendió la entrevista? En numerosas ocasiones se ha constatado que el entrevistador toma una decisión sobre el candidato en los primeros minutos de la conversación, por lo que es buena señal si se alarga.
Para muchos puestos de trabajo hay que superar dos o tres rondas de entrevistas. Si, realizada la primera se invita al candidato a una siguiente ronda, es un signo alentador de que ese perfil se tiene en consideración para el puesto vacante.
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¿El entrevistador pide referencias? Es una clara muestra de estar interesado en el candidato y por ello busca profundizar sobre algún aspecto en concreto de la experiencia laboral previa para tomar una decisión. Que asienta con la cabeza y muestre gestos amables también es un indicio de que se siente cómodo con el aspirante al puesto en la compañía. Punto a favor.
Es más, si desde el departamento de Recursos Humanos se le pregunta al aspirante si está inmerso en otros procesos de selección o si trata de “vender” la idea de cuáles son las cualidades de la empresa, denota que temen que se les escape el candidato y fiche por otra compañía. Otro punto a favor.
Otra buena excusa para estar satisfechos tras una entrevista laboral es si durante la misma hubo negociación sobre el salario y otros complementos, pues suele ser un tema de conversación que se pone sobre la mesa sólo con aspirantes que consideran válidos para el puesto. También es un buen augurio que se comience una discusión sobre la fecha de inicio con expresiones del tipo “queremos tener una persona que ocupe el puesto para comenzar en tal fecha”.
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Hay compañías incluso que realizan una visita por las oficinas para que el candidato conozca las instalaciones y el ambiente de trabajo, e incluso proponen continuar la entrevista con un café o almuerzo, lo que sin duda denota un interés especial por ese profesional.
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